mired1.gif

Sansón y Dalila
Inicio
Declaración de fe
Estudios
Estudios Powerpoint
Biblioteca
Escatología
Reflexiones
Origen y Desarrollo de la Biblia
Máximas y Refranes
De Buen Humor
La Biblia al Minuto
Facebook
La Biblia en Internet
Contáctenos

Sansón fue a Gaza y vio allí a una mujer prostituta, y se unió a ella. Y fue dicho a los de Gaza: “Sansón ha venido acá.” Entonces ellos lo rodearon y lo estuvieron acechando toda la noche, junto a la puerta de la ciudad. Estos estuvieron en silencio toda la noche, diciendo: “Cuando aparezca la luz de la mañana, entonces lo mataremos.” Pero Sansón estuvo acostado solamente hasta la medianoche. Se levantó a la medianoche, y tomando las puertas de la ciudad con sus dos postes, las arrancó con cerrojo y todo. Las puso sobre sus hombros y las subió a la cumbre del monte que mira hacia Hebrón.

Aconteció después de esto que Sansón se enamoró de una mujer del valle de

Sorec, cuyo nombre era Dalila. Y fueron a ella los jefes de los filisteos y le dijeron:

—Persuádele y averigua en qué consiste su gran fuerza, y con qué lo podríamos dominar para atarlo y atormentarlo. Entonces cada uno de nosotros te dará 1.100 piezas de plata.

Y Dalila dijo a Sansón: Dime, por favor, en qué consiste tu gran fuerza, y con qué podrías ser atado para ser atormentado.

Sansón le respondió: Si me atan con siete cuerdas de arco frescas que aún no estén secas, entonces me debilitaré y seré como un hombre cualquiera.

Los jefes de los filisteos le llevaron siete cuerdas de arco frescas que aún no estaban secas, y ella lo ató con ellas. Ella tenía personas acechando en un cuarto. Entonces ella le dijo: ¡Sansón, los filisteos sobre ti! Pero él rompió las cuerdas como un cordel de estopa se rompe cuando toca el fuego. Y no se supo en qué consistía su fuerza. (JUECES 16:1-9)

Volver a Julio