No se turbe vuestro corazón. Creéis en Dios; creed también en mí. En la casa de mi Padre muchas
moradas hay. De otra manera, os lo hubiera dicho. Voy, pues, a preparar lugar para vosotros. Y si voy y os preparo lugar,
vendré otra vez y os tomaré conmigo; para que donde yo esté, vosotros también estéis. Y sabéis a dónde voy, y sabéis el camino.
Le dijo Tomás: Señor, no sabemos a dónde vas; ¿cómo podemos saber el camino?
Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí. Si
me habéis conocido a mí, también conoceréis a mi Padre; y desde ahora le conocéis y le habéis visto.
Le dijo Felipe: Señor, muéstranos el Padre, y nos basta.
Jesús le dijo: Tanto tiempo he estado con vosotros, Felipe, ¿y no me has conocido? El que
me ha visto, ha visto al Padre. ¿Cómo, pues, dices tú: “Muéstranos el Padre”? (JUAN 14:1-9)
Volver a Julio