Ingredientes:
• Una libra
de recuerdos infantiles.
• 2 tazas de
Sonrisas.
• 4 onzas de
esperanza.
• 3 cucharadas
de Ternura.
• 2 tazas de
cariño.
• 2 cucharadas
de alegría.
• 4 tazas de
Amor.
• 2 tazas de
Paciencia.
PREPARACIÓN:
• Limpia los
recuerdos, quitándoles las partes que no sirvan. Agregarle una a una las tazas sonrisas, hasta formar una pasta suave y dulce.
• Ahora, añade
las 4 onzas de esperanzas y permite que repose, hasta que crezca de tamaño.
• Lava cada
uno de los recuerdos con alegría, luego mezclarlos con las dos tazas de cariño.
• Agrega las
dos tazas de paciencia, y las tres cucharadas de ternura.
• Reparte en
porciones iguales todo el amor y cúbrelo con la mezcla anterior.
• Ornéalas
durante toda tu vida en el horno de tu corazón.
• Disfrútalas
siempre con toda tu familia y seres queridos.
Ingrediente
adicional:
Puedes
agregar a la mezcla anterior dos cucharadas de comprensión y una taza de comunicación para que la receta te dure para siempre.
Pero sobre todo, mantén a la mano el libro de recetas “La Biblia” y léela. Para que no olvides las palabras del
mejor chef de la historia, Dios.
1 Cuando vio la multitud, subió al monte; y al sentarse
él, se le acercaron sus discípulos. 2 Y abriendo su boca, les enseñaba diciendo: 3 “Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. 4 “Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán
consolados. 5 “Bienaventurados
los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad. 6 “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.
7
“Bienaventurados
los misericordiosos, porque ellos recibirán misericordia. 8 “Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios. 9 “Bienaventurados los que hacen la paz, porque ellos
serán llamados hijos de Dios. 10 “Bienaventurados los que son perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. 11 “Bienaventurados sois cuando
os vituperan y os persiguen, y dicen toda clase de mal contra vosotros por mi causa, mintiendo. 12 Gozaos y alegraos, porque vuestra recompensa es
grande en los cielos; pues así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros. Mateo 5:1-12
Bendiciones.
Hno. Fredy Monterroza.
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